lunes, 31 de mayo de 2010

Espíritus entre nubes de agua


Las barcas silentes se confunden de señales entre estrellas y lunares
Todo queda herido en un viaje a simple mapa de espaldas y labios que a penas se acercan.
No se acercan al mundo de los besos, tan solo a la penumbra del aliento.
Y el viaje es tan extenso, que los tripulantes mueren, abandonan sus cuerpos.

Perdidos espíritus entre nubes de agua, no se hunden, ni sumergen, tan solo se elevan.

Y siempre hay una orilla amable para el naufrago de besos.
Un rumor de blancuras entre la sombra.
Un engaño matutino a cambio de un consuelo.
Siempre estará el demonio de los labios de fuego.
Al borde un sueño dispuesto a tentar el frío y la ausencia.

Aquí espero, todo un muelle de piel, y susurros de agua.
Una mañana de soles sin demoras, apartados de las luces del tiempo.
Oculta de los deseos de las estrellas fugases.
Doblegada a la voluntad de un dios extraño de las letras.
Que me limita a crear susurros testimoniales de mis penas.

Y en caballo de fuego, o dragón de hielo.
Espero a las puertas de un silencio.
Con tanta música en las manos.
Que temo se convierta en trueno.
Y aleje a la eternidad con sus desnudes de pluma
De pájaro herido.

…pero aquí espero, con la piel recién amanecida de suspiros.
Un camino de señales hasta mi cuerpo, ostenta el mar en oleajes
Y luces de luna.

1 comentario:

  1. HOLA


    Cada vez que publicas leo una vez, dos veces y digo: Si. Es genial.

    Quiero mucho este blog. Gracias por publicar

    UN ABRAZO
    STAROSTA
    (UN PRODUCTO DE TU IMAGINACION)

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Si de verdad me leyeras, si de verdad comprendieras la esencia de mi ser... sabrías que estoy aprendiendo que hay palabras que no se deben decir... hay momentos en que se debe guardar el corazón en su cajita de perfumes hasta el próximo invierno. Son como esas cosas del cuidado de las plantas y del jardín que nos ayudan a mantener la fe en nuestros sentimientos.
Si mi espíritu no ha podido florecer aún en esta tierra, lo mudare de este cielo a cielos nuevos. A un lugar donde las nubes no sean de tormentas o silencios.

Hay muchos libros de silencios y hay muchos libros de sueños que aguardan en los estantes, quizás es hora de que los lea, o que los beba como el néctar que me ayude a sanar de tanta mala suerte en mi corazón y en mis ideas.

Mi alma espera en los arboles, algún día la encontraras. Pero si la recuerdas, dile de esas palabras mágicas y veras como se acerca.