sábado, 23 de enero de 2010

Despiertos o dormidos



Ahora es todo tan simple y distinto,

Quizás por eso le di ese nombre a este paisaje, “simple”

Simple, tus palabras y las mías, ya sin premoniciones, sin rutina.

Y bailo a tu lado inquieta, estallo mi alegría.

Doy vueltas, y doy vueltas, y juego con los sonidos de mi risa.

Se caen los duraznos , por que quiero tus manos.

Me olvido los limones en el jardín, por que tus besos me roban la memoria del pasado.

…yo que hago aquí, de donde he venido, pero te siento te percibo te miro, y las cosas simples tienen sentido.

¿Me despiertas con tu abrazo?

Preguntarte es como pedir permiso,

Pero mis brazos te rodean ya mientras te miro, mientras sonrío.

Te miro,

Te siento

Te amo.

Creo que nunca los verbos tuvieron tanta fuerza ni tantos motivos.

Me desprendo de mis argumentos,

Me refresco en la dulzura de estos nuevos sabores en tus labios.

Me duermo, melancólicamente feliz, amarilla y pálida.

Mi cabello revuelto en el aire, perfuma el ocaso.

Aun estoy en mi patio con el rostro paralelo a la luna.

Aun con los ojos cerrados.

1 comentario:

Si de verdad me leyeras, si de verdad comprendieras la esencia de mi ser... sabrías que estoy aprendiendo que hay palabras que no se deben decir... hay momentos en que se debe guardar el corazón en su cajita de perfumes hasta el próximo invierno. Son como esas cosas del cuidado de las plantas y del jardín que nos ayudan a mantener la fe en nuestros sentimientos.
Si mi espíritu no ha podido florecer aún en esta tierra, lo mudare de este cielo a cielos nuevos. A un lugar donde las nubes no sean de tormentas o silencios.

Hay muchos libros de silencios y hay muchos libros de sueños que aguardan en los estantes, quizás es hora de que los lea, o que los beba como el néctar que me ayude a sanar de tanta mala suerte en mi corazón y en mis ideas.

Mi alma espera en los arboles, algún día la encontraras. Pero si la recuerdas, dile de esas palabras mágicas y veras como se acerca.