sábado, 9 de enero de 2010

...en silencio, y soledad


cuando mas perdida me deja la llovizna del recuerdo, someto mis ojos a los repetidos resplandores de tus manos golpeando mi rostro enfurecido de dolor.

Otra pagina del diario de mi estomago haciendo ruidos, sobre el silencio.

El lienzo de los espejismo me demuestra la imagen que quiere sostener eternamente como muestra de su fulgor.

Absurda rima, los números primos y las horas matutinas. Me empujan una y otra vez hasta la vereda de frutos amargos, haré dulces para los niños, pediré las manos hogareñas prestadas, el delantal del reencuentro dominical me vestirá de hada, y recordare a mi madre, con su cara triste y soleada. Mis vecinos atraparan las aves de los recuerdos conmigo, y haremos un festín con las manzanas robadas. A veces los globos de los cumpleaños sobre vuelan los patios ajenos en venganza de invitaciones que nunca llegaron. Siempre fui una brujita con sonrisa de princesa enamorada, me subía a los arboles para tirar las bolillitas de los paraísos sobre la cabeza de mi mejor amigo que siempre me atrapaba jugando a la mancha, que recuerdos tendrá de mi y de esta vereda aquel nuevo extraño, viejo amigo de lejos sobre mis palabras y mis juegos, recuerdo una piel muy bronceada de patios y veredas de horas de siesta y de juegos de caer por culpa de las baldosas despegadas.

De reír, por que el otro ríe, de hacer música con las carcajadas, de imitar voces de secuestrar mascotas, de inventar historias y de recrearlas con nada, una barita la espada, un piedrita un tesoro, un silencio el asomar del gran dragón, de nuestro temido monstruo, donde fueron a vivir esas criaturas infantiles y mágicas yo les abro el portón de mi casa quiero llenar mi patio de fantasmas.

Quiero que me cuenten de sus vidas, que me enseñen a andar en sabanas, tengo esta cortina descolorida tapando la ventana que me da a la calle, el sol, va haciendo su arte sobre mis espacios, y yo lo observo íntimamente desde mi cama.

Cuando me encuentro sola, las ideas reanudan sus danzas, se despiertan estas criaturas que me hablan, que me gritan que me cantan, yo soy otro fantasma, para otra mirada, ya se que danzo en el recuerdo de algún duende que usa medias verdes y amarillas, a veces naranjas, a veces a rayas.

Voy detrás de la magia de esta especie de ave de la locura que me hace mirar hacia la nada, me abstrae de los sonidos del mundo, de los ruidos abominables de las maquinas, veo como esta híbrido de conjuros, rituales, espíritus, duendes, aves y alas, se posa en los arboles a veces entra en alguna caja torácica, a veces tiene documento nacional de identidad propio de mi continente, cercano a mi casa, a veces se encuentra tras grandes aguas, mi ser observa donde hará nido la magia, a veces es un ave, un pez una luciérnaga invernal, la selva de mi interior se asoma con sus criaturas fantásticas, grita sobre los balcones de mi locura esperando una respuesta gráfica, algún sonido, alguna palabra, algún dibujo con lineas moduladas.


Siempre busco el silencio y la sombra, soy como esos perros viejos, que quieren estar tranquilos, pero acepto el calor, la compañía, las caricias. Que alguien me de un nombre y me proteja, me abrigue entre sus pies y me sonría al abrir la puerta.

1 comentario:

  1. Sinceramente : EXCELENTE!!!!!!!

    muy al estilo La extracion de la piedra de la locura de Pizarnik.

    es impresionante como estalla poesia en tu prosa.

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Si de verdad me leyeras, si de verdad comprendieras la esencia de mi ser... sabrías que estoy aprendiendo que hay palabras que no se deben decir... hay momentos en que se debe guardar el corazón en su cajita de perfumes hasta el próximo invierno. Son como esas cosas del cuidado de las plantas y del jardín que nos ayudan a mantener la fe en nuestros sentimientos.
Si mi espíritu no ha podido florecer aún en esta tierra, lo mudare de este cielo a cielos nuevos. A un lugar donde las nubes no sean de tormentas o silencios.

Hay muchos libros de silencios y hay muchos libros de sueños que aguardan en los estantes, quizás es hora de que los lea, o que los beba como el néctar que me ayude a sanar de tanta mala suerte en mi corazón y en mis ideas.

Mi alma espera en los arboles, algún día la encontraras. Pero si la recuerdas, dile de esas palabras mágicas y veras como se acerca.