sábado, 9 de julio de 2011

Respirar

La carne y la palabra se encuentran en el cuerpo
El universo se refleja y desciende sobre su propia forma hasta alcanzar sus pies y su propio cielo
El ave azul...  que no es de sueño, ni es la muerte
Aprende a suspirar y a recitar los rumores de su alma

A las tres de la tarde camino por la noche del mundo
Un lugar poblado de sombras y disgustos
La vida es la cadena incansable que nos sostiene al cuerpo entre las estaciones del tiempo
Aunque solo parezca un haz de luz huyendo de la lluvia

El paisaje es la respiración de la tierra sobre la superficie
Cada árbol es una inhalación profunda.

2 comentarios:

Si de verdad me leyeras, si de verdad comprendieras la esencia de mi ser... sabrías que estoy aprendiendo que hay palabras que no se deben decir... hay momentos en que se debe guardar el corazón en su cajita de perfumes hasta el próximo invierno. Son como esas cosas del cuidado de las plantas y del jardín que nos ayudan a mantener la fe en nuestros sentimientos.
Si mi espíritu no ha podido florecer aún en esta tierra, lo mudare de este cielo a cielos nuevos. A un lugar donde las nubes no sean de tormentas o silencios.

Hay muchos libros de silencios y hay muchos libros de sueños que aguardan en los estantes, quizás es hora de que los lea, o que los beba como el néctar que me ayude a sanar de tanta mala suerte en mi corazón y en mis ideas.

Mi alma espera en los arboles, algún día la encontraras. Pero si la recuerdas, dile de esas palabras mágicas y veras como se acerca.