lunes, 14 de diciembre de 2009

Tan estupida como entonces y tan serena.


Soy la misma idiota, acercándome a las mismas cosas distraida.
Mantengo la fidelidad a mi viejos egoísmos.

¿siempre tenés tu camisa de bienvenida?
aunque no seas el mismo, otra voz, otro rostro...

Mi corazón se autodenuncia en tu patio, frente al antiguo circulo.

¿otra vez el ritual?
¿esta vez, me darás la mano?
las hojas me hablan del clima,
el silencio es la ausencia de algo...que recuerdo como un sabor...
un sabor después de otro sabor, de otro modo de no ser extraños.

Estoy tan confundida.
Estoy desierta, ausente, dormida.
con un algo en el esternón que se tuerce por decirte...
¿sabes que es mejor hablarnos con los labios?

Me gusta mentir...
sobre las cosas que siempre te miento,
observar como te reís
y como llevas mis mentiras a tus manos.
Esta vez, la noche me observa.
Soy una forma extraña ante su sombra gigante y perfecta.
No sé como llego siempre a ésta misma calle.
Conozco los gestos detrás de los sonidos, esa no es una sonrisa.
otra expresión del dolor será mi compañía.
...sabes.. me gustaría hablar de otras cosas,
escribir de otras cosas,
pero solo soy observadora de la alegría.
Esta melancolía es creativa.
Me lleva a recordarte, a evocarte.
...si, claro, es triste.
Pero la tristeza tiene ese sabor de lo ácido.
De los caramelos cítricos que nos recuerdan.
Todas las formas de dolor,
todas las aves,
éste simple poema libre.
Acá en la puerta de mi casa,
como un fantasma que se niega a partir, te espero.
No espero tu llegada, no espero tu mirada.
Te espero, no se si debería decirlo así.
Siento que no termino de estallar porque estoy esperando algo.
Una mirada de reojo de tu recuerdo a mi nombre.
Una melodía que te traslade a mi rostro.
Un silencio después de la pregunta de un amigo.
No sé bien, que es eso?, eso extraño que espero.
No es tu rostro, no es tu voz, tus ojos,
tus palabras, tus besos, no... no es eso.
Recuerdo esa energía del acompañarnos, de perdernos en los arboles.
Quizás espero de nuevo el principio,
el transcurso y el final de algo, que se desdibujo en el aire.
¿esto será muy autobiográfico?
Si todavía seguís parte de mis pasos,
cuando te encuentres con estas palabras... nada te resultara extraño.
Solo....seguramente, lo sentirás innecesario.

3 comentarios:

  1. Ay, malvada! Ahora cualquier evocación de similitud de pensares será simplemente una copia desdibujada y menos artísticamente elaborada de lo que vos dijiste... sabelo, de lo que leí tuyo es lo que más me gusto jaja.

    Y con la frase "Esta melancolía es creativa." me hizo acordar a una frase de Tolstoy: "La gente feliz no tiene historias".

    Y como vos dijiste, esto seguramente de para seguir en msn :P

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  2. simplemente fantatico, cada dia escribis mejor, la verdad te doy mis aplausos.

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  3. El amor puede traer tristeza, el poeta portugués Florbela Espanca ilustra este soneto:

    Eu quero amar, amar perdidamente!
    Amar só por amar: aqui... além...
    Mais Este e Aquele, o Outro e toda a gente...
    Amar! Amar! E não amar ninguém!

    Recordar? Esquecer? Indiferente!...
    Prender ou desprender? É mal? É bem?
    Quem disser que se pode amar alguém
    Durante a vida inteira é porque mente!

    Há uma primavera em cada vida:
    É preciso cantá-la assim florida,
    Pois se Deus nos deu voz, foi pra cantar!

    E se um dia hei-de ser pó, cinza e nada
    Que seja a minha noite uma alvorada,
    Que me saiba perder... pra me encontrar

    Saludos

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Si de verdad me leyeras, si de verdad comprendieras la esencia de mi ser... sabrías que estoy aprendiendo que hay palabras que no se deben decir... hay momentos en que se debe guardar el corazón en su cajita de perfumes hasta el próximo invierno. Son como esas cosas del cuidado de las plantas y del jardín que nos ayudan a mantener la fe en nuestros sentimientos.
Si mi espíritu no ha podido florecer aún en esta tierra, lo mudare de este cielo a cielos nuevos. A un lugar donde las nubes no sean de tormentas o silencios.

Hay muchos libros de silencios y hay muchos libros de sueños que aguardan en los estantes, quizás es hora de que los lea, o que los beba como el néctar que me ayude a sanar de tanta mala suerte en mi corazón y en mis ideas.

Mi alma espera en los arboles, algún día la encontraras. Pero si la recuerdas, dile de esas palabras mágicas y veras como se acerca.