lunes, 7 de diciembre de 2009

..seré otro ser.





En compañía de un fantasma, camino la plaza.
Circular espera, de llorar, de gritar.
De caer, de caer dando vueltas.

Silencio de los espíritus que controlan mi boca.
Mi boca muda, mi sombra inquieta sobre mi cuerpo estable.
La lejanía, unas palabras inaudibles.
El amor y el dolor, enfrentados con espadas
Sosteniendo su guerra fatal ante nosotros.

Otra forma del olvido, otra forma del engaño,
La compañía que no deseamos.
El beso que no esperamos.
Las manos en las manos que no quisimos.
La sombra, junto a otra sombra y no en una sombra sola.

Abandonar el perfecto amor, por el amor real.
Los sueños, por la verdad.
La plaza de juegos, por un lugar silencioso.

Pausa quietud, estremecedores lamentos de los ojos.
Soledad sonora de los rostros que gritan despedidas.
Campanillas entupidas reciben los silencios haciendo melodías.

Me iré, detrás de mi el mundo suspira su ultimo esfuerzo,
su ultima intención de huida.
Me iré, caeré otra vez al lago descalza.
Mi cabello olvidara las heridas.
Mis manos verán sus manos,
y serán otras formas del olvido, que avecina.

Caeré sobre el lago y hacia el cielo,
sobre la luz de los astros muertos que brillan.

Caeré sobre el lago, soltare la vida.
Me uniré al espíritu de plumas de los árboles,
Azul expresión de visión del día.
Seré otro ser, de lejos,
si me encuentran tus duendes del jardín de lluvia y las hormigas.

2 comentarios:

  1. Disfrute recitarlo en voz alta, ya que senti cada palabra...
    Me gustaria escucharlo de vos.

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  2. muchas gracias, y si es verdad la lectura en voz alta tiene un no se que...

    que estes bien..nos leemos!!!

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Si de verdad me leyeras, si de verdad comprendieras la esencia de mi ser... sabrías que estoy aprendiendo que hay palabras que no se deben decir... hay momentos en que se debe guardar el corazón en su cajita de perfumes hasta el próximo invierno. Son como esas cosas del cuidado de las plantas y del jardín que nos ayudan a mantener la fe en nuestros sentimientos.
Si mi espíritu no ha podido florecer aún en esta tierra, lo mudare de este cielo a cielos nuevos. A un lugar donde las nubes no sean de tormentas o silencios.

Hay muchos libros de silencios y hay muchos libros de sueños que aguardan en los estantes, quizás es hora de que los lea, o que los beba como el néctar que me ayude a sanar de tanta mala suerte en mi corazón y en mis ideas.

Mi alma espera en los arboles, algún día la encontraras. Pero si la recuerdas, dile de esas palabras mágicas y veras como se acerca.