domingo, 7 de febrero de 2010

Saco de plumas amarillo.

No se si escuche alguna vez

Como cantan los canarios.



No lo recuerdo.



Si sus plumas me dijeron algo de mi destino.



Si en mi bolsita de penas y de riquezas condenadas.

Mantengo algún sonido de sus picos.

Soy como un insecto de luz.

Brillo y parpadeo.

Pero debe estar muy oscuro.

Mi luz es pequeña.

Si el sol esta cerca, mis brillos no tienen sentido.



Exploto, y sonrío.

La risa es la mejor canción entre todos los sonidos.

La tristezaza permite que ella llegue,

Le deja un sitio

Y la luna se dibuja entre los labios

Con un sabor a reencuentro

Con un sabor a cariño.


No se quien soy

No lo recuerdo

No se si este cuerpo que llevo es el mío

En el gran placar del tiempo se confunden los abrigos.

Yo llegue con mucho frío en mi espíritu.


No había nada azul para mi centro

Solo este saco de plumas amarillo.

3 comentarios:

  1. Un saco de plumas amarillo.
    Una colección de sonrisas de tus labios.
    Una canción desempolvada.
    Una ilusión desatada.
    Y los canarios cantan por ti.
    Hablando de tu universo.
    De tu ejercito de sueños.
    De tu poblado de hadas.
    De tu plantación de limones...

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  2. Vos tambien lloraste mucho con los primeros 5 minutos de la pelicula Trapito.. se re nota

    Besugo

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  3. ey, Diego?
    jajajajajajaja
    si llore.
    jhajajajajaja

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Si de verdad me leyeras, si de verdad comprendieras la esencia de mi ser... sabrías que estoy aprendiendo que hay palabras que no se deben decir... hay momentos en que se debe guardar el corazón en su cajita de perfumes hasta el próximo invierno. Son como esas cosas del cuidado de las plantas y del jardín que nos ayudan a mantener la fe en nuestros sentimientos.
Si mi espíritu no ha podido florecer aún en esta tierra, lo mudare de este cielo a cielos nuevos. A un lugar donde las nubes no sean de tormentas o silencios.

Hay muchos libros de silencios y hay muchos libros de sueños que aguardan en los estantes, quizás es hora de que los lea, o que los beba como el néctar que me ayude a sanar de tanta mala suerte en mi corazón y en mis ideas.

Mi alma espera en los arboles, algún día la encontraras. Pero si la recuerdas, dile de esas palabras mágicas y veras como se acerca.