Es porque llegue cansada.
Y con la sonrisa… apenas asomándose de un bolsillo.
Es por que caí a mitad del camino.
Y se lastimo la suerte de mis palmas y mis rodillas.
Porque perdí un zapato, mi zapato perdió una calle,
Y me encontré desnuda y sin abrigo.
En la calle en que los faroles dan sombras que se dibujan en la luna.
Es porque no alivio el sueño en mi almohada, por que esta llena de vidrios.
Que se pegan a mi rostro y se enganchan de mis sueños cuando respiro.
Por que baje de la cima de mis miedos, con una bolsa de tonterías para darte.
Una bolsa de te quieros en papeles amarillos.
En boletos de tren…
En papeles de caramelos de limón y chocolate.
Porque le dije a mi árbol de preguntas, que se callara.
Cuando el viento me acerca tu perfume.
Por que me desnudo en la orilla.
Y mi vestido cae y se siente también desnudo.
Sin la piel que lo vista.
Por que mis pies, se pisan a si mismos, de vergüenza.
O de graciosos.
O de sorprendidos, por las sonrisas que encuentro.
Correspondiendo a mi sonrisa.
Porque tengo un lunar en la cima de mi vientre.
Justo a mitad de mi cuerpo, debajo de mi ombligo.
Porque no se si mi seno izquierdo es mas pequeño.
Si me duele una muela, o si se me rompió una uña.
Por que se me enreda el cabello en las preguntas.
Y los nudos forman arañas, que no son ni feas ni dicen profecías.
Por que si junto todos mis temores, puedo hacer un castillo de naipes
Y liberarme de ellos de un suspiro.
Porque como siempre no estas conmigo.
Porque como siempre no estas conmigo
Porque como siempre, duele abrazarse a mi centro
Y que tú no escuches estos sonidos.
Porque cuando me convierto en alondra
No se donde esta mi nido.
Y me convierto en un ave sin memoria
Que nuevamente se queda en el piso.
¿Es por eso?
¿Será por eso?
¿Será más de lo mismo?
¿Será que las hormigas que no quiero marcan un camino?
Y yo… que quiero ser cigarra.
Aunque me llegue el invierno.
Y apague mis sonidos.
Es por que no te pienso, y te pienso.
No te olvido, y te recuerdo.
No te necesito y sin embargo eres mi más gran alivio.
Porque las palabras son puentes y las letras son hilos.
Y enlazare a la luna para decirle al oído.
Lo que no te digo
Lo que no te digo.
¿Es por eso?
Que beberé de tus besos esta noche.
Que acercare sin temores, mis labios a tus oídos.
Que te hablare en los idiomas que invento para acercarte y para ganarle al vacío.
¿Es por eso?
Que beberé de tus besos esta noche.
Aunque ya se como termino Ícaro.
Y si se incendian mis alas cuando amanezca.
Tu beso me dará el alivio.
De estar perdida a mitad de las aguas.
Sin alas sin recuerdos, y como siempre.
Diré otra vez….
Tú no estas conmigo
Tú no estas conmigo.
Tú no estas conmigo.
Y si despierto en mi cama naufragando en el fantasma de mi sabana.
Me convertiré en un hibrido, acercaré mi boca a mi a oído.
Y me diré…
Él no esta contigo
Él no esta contigo.
Él no esta contigo.
Y sin embargo… lo dijo mejor Sabina.
Y sin embargo lo que él dijo, lo repito.
Y sien embargo: Te quiero.
Y bebería de tus besos aunque no estés conmigo.
Y bebería de tu sueño mi propia muerte.
Mi propio olvido.
Y daría mil vueltas, con esta cuerda inútil de versos al mundo.
Para exprimirlo.
Esfera inútil, extraño estadio de mi delirio.
¿Será por eso?
Porque ya es tarde, tengo sueño.
Una mitad de mi cama esta fría.
Un todo de mi alma tiene frío.
Desangrarse en letras me dará una anemia.
Que solo sanara tu abrigo.
Y beberé de tus besos aunque no estés conmigo.
Y me introduciré en tu sueño
Aunque al despertar… ya no estés conmigo.
El tiempo suscribe historias.
ResponderEliminarArremolina palabras con ayuda del viento.
Tu no le temes a ninguno de los dos.
Y enciendes los versos, apuntando bien alto.
Como si el techo de un maestro, no fuera techo,tan sólo pretexto, para escribir en paralelo.
En torno a el.
Y sin embargo, eres tan gigante.
Que hasta las canciones te aplauden.
Después de leerte, tuve que escuchar la canción.
Y cada estrofa era una razón.
Para inclinarme ante vos.
Por tamaña osadía.
Por semejante alegría.
De tus palabras.
De ti.
Eres enorme y sin techo.
Y no lo digo yo.
Lo dice el viento y el tiempo.
Las flores y plantas.
Las criaturas de tu mundo.
Que propagan la leyenda de ti