Ella es, como yo quisiera.
Esta noche buscare donde hundir esta pena.
Es un amarga semilla que me dejo un cometa.
Esta noche buscare donde hundir esta pena.
Tratare de resistir tras las horas.
Para que el sol me renueve las fuerzas.
Una noche más.
Una noche más
Hasta que tú aparezcas.
Ella es, como yo quisiera.
Oscura alta esbelta.
A mi cada día me resta.
Blancura, sueños,
Espejismos, arena.
No soporto más tormentas.
No creo que mi cuerpo siga mucho más.
Si mi alma no se acerca.
Salgo todas las mañanas
Le pongo un platito de leche en las raíces del árbol.
Pero no desciende.
¡Alma inquieta!
Se mece entre las ramas
Y mira las ciruelas.
Mi patio esta lleno de ausencias.
No hay flores verdaderas.
Solo estas que perfuman el vientre de la tierra.
No hay duendes, no bailan estrellas.
Solo unas abejas que me miran y se preguntan
¿A quien quiere bajar de las ramas?
¿Esta mujer todas las mañanas si no le da alguna promesa?
Yo te prometo alma.
Que pasearemos a la hora de la siesta.
Que te llevare a jugar con los limones.
De los árboles de los vecinos si nos dejan.
Pero regresa a mi cuerpo.
No soportare más días de ausencia
No puedo sostener esta percha de huesos
Si no cuidas mis soledades
Si no abrigas mis penas
Si no soportas por mí esta tristeza.
Insistale! no puede resistirse.
ResponderEliminarPresente…