Si no me oyes hablar, pero mi voz te envuelve en el aire.
Sonríe, te esta susurrando mi alma.
Si no me ves, ni me escuchas, ni sabes en que sitio de la tierra esta mi cuerpo.
Ni a que nube vuelan mis sueños.
Cierra los ojos, abre el cielo de tu cuerpo.
Deja emanar el perfume de tu espíritu a la luz de tu silencio.
Me veras desde tu cielo.
Directo a mi cielo.
cada noche cierro los ojos... por el sueño
ResponderEliminarpero de dìa me lo paso caminando con los ojos cerrados... aunque tabièn sea por el sueño, aprovecho en ambos casos para ver un poco màs allà de las nubes de mi conciencia... para ver el azul del jabòn... digo, del cielo