Las olas destruyen tantas ilusiones.
Y se derrumban las arenas.
Que se preguntan a si mismas.
¿Por qué no fuimos estrellas?
¿Por qué no fuimos tormentas?
Apretó los puños.
Por que no quiero apretar los dientes.
Apretó los puños sobre si mismos.
Porque no quiero cerrarlos violentos sobre mi pecho.
… ya lo dije, mi pecho no es un tambor,
Donde se pueda descargar la música de percusión.
No golpees allí.
Nadie entenderá, mi corazón salio a almorzar.
Las olas destruyen tantas ilusiones.
Traen la basura que los ignorantes que somos
Arrojamos al mar.
Me anestesio de ruidos.
Salgo a la calle.
Me confundo entre los autos.
Soy otra mujer, que camina.
Y se pierde entre las caras de la ciudad de desconocidos.
Te respiro crudamente.
Sabor a verdad.
Sabor a hielo seco, que crispa mis sentidos.
Se fue el sabor.
Se fue la humedad.
Se fue el color, del verano.
Aunque el sol se resista sobre los lagos que invente para encontrarte.
Se fue el verano.
El otoño me saluda desde la oscuridad.
Caeré.
Como caen las hojas.
Graciosamente del árbol de tus recuerdos.
Caeré y un día al elevar de tus ojos y tu esfera.
Ya no me verás.
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